PROYECTO
 
 

Métodos

2.2. Vulnerabilidad

En la parte de vulnerabilidad, se consideran los factores socio-económicos por un lado, y ecológico-paisajísticos, por otro (fig. 3).

Fig. 3. Componentes de Vulnerabilidad en el proyecto Firemap

2.2.1. Valor socioeconómico

La determinación de la vulnerabilidad socioeconómica se ha planteado mediante el desarrollo de un conjunto de algoritmos que permiten evaluar las repercusiones de los incendios forestales en los recursos naturales, tanto de naturaleza tangible como intangibles (Rodríguez y Silva et al., 2007). La unidad espacial definida en este índice ha sido la celda de 10x10 km, esta decisión se justifica por la conexión con la base de datos nacional de la estadística de incendios forestales, posteriormente se ha efectuado una pasterización a 1 km2  para que el resultado pueda operar con otros índices del proyecto. El esquema general seguido ha sido en primer lugar la toma de contacto e identificación del conjunto de variables necesarias para el desarrollo de los algoritmos, simultáneamente han sido identificadas coberturas digitales existentes que permiten obtener, relacionar e interpolar las variables que han sido seleccionadas para el cálculo de las variables dependientes que proporcionan solución a los algoritmos desarrollados. Con posterioridad se ha integrado el conjunto de variables explicativas de la valoración socioeconómica en un modelo de vulnerabilidad representativa de la celda estudiada.
En la valoración socioeconómica se han considerado de forma diferenciada la determinación cualitativa y cuantitativa de los aspectos ambientales, de ocio y recreo, de los recursos naturales, del paisaje y de las propiedades presentes.
El modelo operacional y la arquitectura de cálculo seguido han sido dirigidos con el fin de facilitar la adaptación y aplicabilidad del procedimiento en otras áreas diferentes de las seleccionadas como experimentales en el desarrollo del modelo.

Rodríguez y Silva, F; Molina, J.R.; Herrera, M y Zamora, R. 2007. Vulnerabilidad socioeconómica de los espacios forestales frente al impacto de los incendios, aproximación metodológica mediante SIG (Proyecto Firemap). Wildfire 2007. Sevilla, España.

2.2.2. Potencial de degradación

La vulnerabilidad ecológica puede definirse como la susceptibilidad del ecosistema al cambio como consecuencia de la ocurrencia de un incendio forestal. Algunas características medioambientales, así como la estructura de la vegetación (composición y frecuencia) son factores claves para estimar la vulnerabilidad. La metodología desarrollada en este índice del proyecto se basa en el uso de imágenes espaciales y análisis SIG (Ibarra et al., 2007).
El modelo de vulnerabilidad ecológica se estructura en dos períodos temporales: corto plazo (basado en el riesgo de erosión del suelo) y medio plazo (basado en los cambios sufridos por la vegetación en cuanto a su composición y estructura). Los factores utilizados en el modelo se integraron aplicando una matriz.
La vulnerabilidad a corto plazo considera los siguientes factores ambientales: agresividad de la precipitación, pendiente y factor de erodabilidad del suelo. La integración de estos factores ambientales toma en consideración la capacidad de respuesta de la vegetación, variando en función de las estrategias reproductivas de las especies dominantes (especies germinadoras y rebrotadoras), las limitaciones hídricas y la frecuencia del fuego.
A medio plazo, la vulnerabilidad ecológica se determinó en función de la capacidad de la vegetación en recuperar las condiciones previas al incendio en su composición  y estructura (resilencia). Esta capacidad está asociada a la presencia/dominio de especies con diferentes estrategias reproductivas, estructura de la comunidad vegetal y la frecuencia de incendios en el área.

Ibarra, P.; Alloza, J.A. ; Pérez-Cabello, F.; Baeza, M.J.; Duguy, B; Echevarría, M.T.; Llovet, J; Rovira, P. y Vallejo, V. R. 2007. Ecological Vulnerability to forest fires: an evaluation model. Wildfire 2007. Sevilla, España.

2.2.3. Valor paisajístico

Para la valoración de los territorios estudiados en función de las figuras de protección, se ha considerado la presencia o ausencia, en cada cuadrícula de Km2, de los siguientes espacios: Espacios Naturales Protegidos, Zonas de Especial Protección de Aves, Lugares de Importancia Comunitaria, Hábitats de importancia comunitaria y Montes de Utilidad Pública. En algunas Comunidades Autónomas como Madrid, se han añadido otras figuras de protección específicas (Montes Preservados). En el caso de los Espacios Naturales Protegidos que disponen de Plan Rector de Uso y Gestión y/o Plan de Ordenación de Recursos Naturales, se ha empleado la zonificación ambiental para diferenciar zonas en función de su vulnerabilidad ante incendios forestales. Los directores de conservación de cada espacio han valorado cada zona ambiental. Por otra parte, los espacios que, simultáneamente, han sido declarados como Zonas de Especial Protección para las Aves y Lugares de Importancia Comunitaria sólo han sido valorados una vez con objeto de evitar redundancias. Igualmente, los hábitats de importancia comunitaria que no han sido ya propuestos como Lugares de Importancia Comunitaria, han sido valorados diferentemente en función de su grado de prioridad, establecido en la Directiva Hábitats. Estas valoraciones han sido integradas mediante una suma lineal ponderada, siguiendo las orientaciones de los expertos que recomiendan multiplicar por 2 la información de los Espacios Naturales Protegidos al considerarla más relevante, y teniendo en cuenta la proporción de cada polígono respecto a la superficie total de la cuadrícula.
El valor intrínseco del paisaje es el resultado promedio simple, sin ponderar, de la combinación de seis componentes: índice de rareza, índice de representatividad, grado de proximidad de la vegetación actual a la vegetación clímax, índice de diversidad de Simpson, índice de entremezclado y yuxtaposición y un índice de conectividad. Para su cálculo se han empleado el mapa de ocupación del suelo de CORINE-Land Cover del año 2000 y la cartografía de series de vegetación de España.
El valor paisajístico es el resultado promedio de la combinación de los dos componentes anteriores (valor en función de las figuras de protección y valor intrínseco), aplicando un peso de 1,5 al primero de ellos. Los expertos consultados están de acuerdo en asignar mayor peso a este modelo debido a la mayor importancia de las figuras de protección en la consideración de la vulnerabilidad del territorio.

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Participantes















 

2006 CARTOFIRE
Universidad de Alcalá, Departamento de Geografía.
Contacto: emilio.chuvieco@uah.es